Las preocupaciones...esos pensamientos que resultan algo incómodos y que pasan por nuestra mente de vez en cuando, sin quedarse el tiempo necesario como para acordarnos de cuáles fueron las preocupaciones que tuvimos ayer o la semana pasada...

A diferencia de las preocupaciones, las obsesiones son pensamientos, imágenes o impulsos negativos y permanentes, con un tema central de preocupación y causantes de un miedo intenso. Generalmente, el contenido de las obsesiones se relaciona con los miedos más personales, aquellos que vulneran la moralidad y ética del que los sufre, despertando de esta forma, una intensa angustia cuando aparecen.

Las obsesiones pueden interferir de manera considerable en el propio bienestar, pues imagínate pensar continuamente que algo terrible va a suceder; ¿sentirías un miedo constante, verdad?

Las compulsiones aparecen tras la sensación de miedo y son empleadas como una herramienta de disminución de la ansiedad; esa angustia que se manifiesta mediante el pensamiento obsesivo y catastrófico anterior.

Pero, ¿qué son realmente las compulsiones?

Las compulsiones son una manera de conseguir alivio ante las obsesiones; son acciones mentales o de comportamiento ritualizadas y repetitivas, que varían de una persona a otra, y poseen una gran diversidad de forma.

De este modo, las compulsiones son una estrategia que facilita una “falsa sensación control” ante un pensamiento obsesivo, sin embargo, el alivio producido es momentáneo, por lo que, la obsesión aparecerá de nuevo y la compulsión se repetirá, convirtiéndose así en un “círculo vicioso”.

REFERENCIAS

Belloch, A. y Cabedo, E. (2011). TOC. Obsesiones y compulsiones. Tratamiento cognitivo del trastorno obsesivo compulsivo. Alianza.
López, A. (2020). Señales de vida. TOC Granada.